HELADOS CASEROS PARA TODOS (LITERALMENTE)

¿A quién no le gustan los helados? En cuanto a sabores cada uno tenemos nuestro preferido, pero si algo está claro es que es algo que a todos nos encantan… Pero en ocasiones compramos helados en el supermercado que están riquísimos pero no sabemos realmente lo que llevan. Aditivos, demasiado azúcar, conservantes, ingredientes con nombres ilegibles que no sabémos ni qué son… Una opción para darnos un capricho de vez en cuando es hacer nuestros propios helados en casa, así que hemos decidido compartir unas cuantas recetas de helados caseros que no os llevarán mucho tiempo de hacer, y no os preocupéis porque no es necesario tener una máquina de hacer helados. 

Y cuando decimos que este post es para todos es porque hemos dejado alguna receta sin gluten, para veganos, intolerantes a la lactosa y diabéticos, así todos podemos disfrutar de un helado hecho por nosotros mismos.

Recordad que siempre podéis hacer alguna modificación en los ingredientes o incluso agregarle algo, como trocitos de fruta, galleta o chocolate. ¡Lo mejor es experimentar! Y el procedimiento es muy simple para todos los helados, mezclar los ingredientes, meter en un tupper o cualquier recipiente y al congelador. Una vez esté en el congelador, ir mirando de vez en cuando y removiéndolo para que no se cristalice.

Comenzamos con algo que no son exactamente helados, pero qué más da si se llaman helados, polos… todo está rico y nos encanta.  En el blog hemos publicado varios posts debatidos de frutas (y algunos con verduras) para hacer en casa. Un montón de combinaciones de sabores. Podéis hacer estos batidos saltándoos la parte de echarle hielo y luego verter el líquido resultante en uno de estos recipientesde hacer polos y listo! 

Otra opción es mezclar estos batidos (de nuevo, sin el hielo), con nata que previamente habremos montado, para que salga un helado cremoso. Recordad id removiéndolo de vez en cuando para que no cristalice. Con esto tenéis un montón de combinaciones de helados. Probad a ponerles trocitos de galletas, frutas o lo que se os ocurra para darles un toque especial.

Helado de Nutella.

• 200ml de nata para montar
• 200ml de leche
• 200gr de Nutella

(Tanto con la nata como con la leche, si son enteras el helado quedará más cremoso)

Juntamos la Nutella con la leche y batimos hasta conseguir que esté bien mezclado. Batimos aparte la nata hasta que esté cremosa y montada. Una vez tengamos la nata al punto, vamos añadiendo la mezcla de Nutella y leche, poco a poco y vamos mezclando con movimientos suaves. ¡Al congelador!

Sorbete de limón.

• 200ml de zumo de limón exprimido, y la ralladura de uno de los limones.
• 200ml de leche desnatada
• Una clara de huevo.
• Endulzar al gusto. Se puede endulzar con un edulcorante tipo stevia para hacer la receta apta para diabéticos.

Batir el zumo, la leche, la ralladura y el endulzante y meter en el congelador. Pasada una hora lo sacamos, batimos bien, agregamos la clara de huevo mezclándola bien con el resto y volvemos a guardar en el congelador.

Podéis servir este helado en la misma cáscara de limones o probar a hacerlo con otros cítricos.

Helado de Oreo

• Nata para montar
• Un chorrito de leche condensada
• Unas cuantas Oreo troceadas.

Las cantidades según las raciones que queráis hacer. La nata es la base, ya que la leche condensada solo se echa un chorro para darle sabor, así que sobre esa cantidad vais echando el resto de ingredientes. Montáis la nata, le añadís la leche condensada y las Oreo troceadas y al congelador.

Helado de tarta de queso

• Nata montada
• Leche condensada
• Queso para untar tipo Philadelphia
• Fresas
• Mermelada de fresa

Montamos la nata, cantidad al gusto, pues como la receta anterior esto es la base y depende de la cantidad que queráis hacer. Echamos un chorrito de leche condensada para darle sabor, la mitad o tres cuartos de una tarrina de Philadelphia, unas cuantas fresas troceadas y tres cucharadas de mermelada, mezclamos y al congelador. Como las tartas de queso tienen una base de galletas, podéis trocear vuestras galletas favoritas y echárselas a la mezcla. Otra opción es cambiar las fresas y la mermelada por otras frutas del bosque, como arandanos. ¡Está muy rico!

Helados para veganos, celiacos e intolerantes a la lactosa:

Estos helados que llevan plátano como base son perfectos para la gente vegana, y podéis agregarle los ingredientes que queráis. Y como la base está hecha con plátano también son aptos para que la gente con intolerancia al gluten. Solo tened cuidado si le agregáis otro ingrediente, que este tampoco tenga gluten. Además, tampoco lleva leche, así que los intolerantes a la lactosa pueden tomarlo también. ¿Es este el helado perfecto?

La base de plátano se hace pelandolo y cortándolo en rodajas finas. Luego se extienden en una bandeja de horno (con papel para que no se pegue) y se congelan durante unas horas (cuando estén congeladas las podémos meter en bolsas para que no ocupe tanto). Para hacer el helado solo tenemos que sacar las rodajas y meterlas en una picadora (o en la misma batidora) hasta que tengan textura de helado. Super fácil.

Y eso os lo podéis tomar así o agregarle lo que os ocurra para tener otros sabores. Otras frutas, canela, calabaza, zanahoria, chocolate… Hay un montón de combinaciones.

Y hasta aquí este post. ¿Qué helado os ha llamado más la atención? Si os animaís a hacer alguno contadnos que tal os han quedado, al igual que si tenéis alguna sugerencia para otra receta así para el verano que queráis que publiquemos. Muchas gracias por leernos =)